El abogado y comunicador critica la represión policial y expresa su preocupación por el impacto en las libertades civiles.
Santo Domingo, R.D. – En su intervención este lunes 29 de abril en el programa “Esto No Es Radio”, del grupo Alofoke, dirigido por el empresario Santiago Matías (Alofoke), el abogado y comunicador José Martínez Brito denunció lo que considera un abuso sistemático de poder por parte de la Policía Nacional, responsabilizando a las autoridades por la creciente inseguridad que sienten los ciudadanos ante el control excesivo por parte de la fuerza pública.
Martínez Brito, en un tono enérgico, afirmó que el clima de vigilancia constante y la presencia policial en las calles está afectando la vida cotidiana de los ciudadanos. “Hoy en día uno tiene miedo hasta de tener intimidad con su esposa en horario nocturno”, expresó, haciendo énfasis en lo que considera una sensación de asfixia provocada por los operativos policiales, que se realizan principalmente por la noche, sin la debida transparencia ni un marco claro de respeto a los derechos fundamentales.
El comunicador agregó que incluso el consumo de bebidas alcohólicas, una actividad social común, ha adquirido un matiz de peligro para quienes deciden disfrutar de un trago. “Tomarse un trago también da miedo, porque uno no sabe si será apresado por la policía, incluso sin motivo alguno”, subrayó, refiriéndose a la incertidumbre que viven muchos ciudadanos debido a la percepción de arbitrariedad en los arrestos y detenciones.
Estas declaraciones de Martínez Brito fueron ventiladas tras una reciente entrevista con un barquero de La Caleta, quien relató que un policía intentó cerrar su negocio sin justificación, solo porque el horario en la noche se había extendido más allá de lo permitido. El barquero expresó su temor ante la situación y la amenaza de que, si se mantenía abierta la peluqueria, podría enfrentar sanciones o hasta ser detenido, lo que levantó las alarmas sobre los excesos de la autoridad en la regulación del comercio y el control social.
Martínez Brito responsabilizó directamente al mayor general Ramón Antonio Guzmán Peralta, director de la Policía Nacional, y a la ministra de Interior y Policía, Faride Raful, por permitir lo que calificó como un abuso en el uso de la fuerza pública, que, en su opinión, se ha vuelto una amenaza constante para los derechos de los ciudadanos. Según el abogado, los operativos policiales no solo generan inseguridad, sino que también están siendo utilizados para presionar a la población y aumentar el control social.
La preocupación sobre los abusos policiales en relación el consumo de alcohol y las restricciones nocturnas se ha intensificado tras este incidente. Martínez Brito cuestionó la falta de claridad en las políticas de seguridad y la forma en que se están llevando a cabo los operativos, los cuales, según él, parecen más enfocados en crear un ambiente de miedo que en garantizar la seguridad y el orden público.
Hasta el momento, ni la Policía Nacional ni el Ministerio de Interior y Policía han emitido respuestas oficiales a las denuncias de Martínez Brito y el barquero de La Caleta, mientras que la controversia sigue siendo un tema candente en la opinión pública.
